A menudo nos olvidamos de que la página web de la empresa es el punto de entrada por el que nos van a conocer muchos clientes. Perdemos la perspectiva y acabamos con una página web impersonal, que lo mismo es de nuestra empresa que cambiándole el logo podría ser la de la competencia. Por eso creo que es necesario mimar la página web para que enseñe como es tu empresa.

La web debe mostrar la mejor cara de nuestra empresa, pero debe ser personal, mostrando los aspectos más destacados de nuestra empresa, por qué el cliente que llega debe quedarse en la misma, por qué tiene que confiar en nosotros, etc. Es una cuestión complicada de conseguir y también de transmitir.

No hay que olvidar que, por lo general, la web la hace una empresa o profesional externo a la misma, al que debemos informar y facilitar el conocimiento necesario de nuestra empresa para que lo plasme en la web. La imagen de nuestra empresa debe ir más lejos de unos colores corporativos, los logos y textos enlatados.

Si hacemos un paralelismo con el mundo de la televisión, muchas páginas me recuerdan a esas series que tienen risas y aplausos postizos, para incitar al espectador a la imitación, pero no es natural. Lo mismo pasa con muchas páginas, tenemos todo aquello que debe contener una web, pero nos hemos olvidado de aspectos más personales.

Las páginas de presentación de la empresa, de los trabajos realizados, del personal y de los clientes se pueden hacer de una manera más personal, con más cariño, algo que refleje el espíritu de tu empresa, los valores que presenta para su contratación, para incitar al cliente a comprar algo.

Es cierto que todas estas cuestiones se trasladan muchas veces a las redes sociales, un entorno que favorece más este trato personal, la conversación y la comunicación con los clientes. Pero esto no significa que tengamos que olvidarnos de mimar estos aspectos en nuestra página web.

Fuente: TecnologíaPyme.com